Presente y pasado
Épocas diferentes de lectura, esta, en particular es sobre la lectura online, cosa se puede conseguir fácilmente y descargar, pero hay el recuerdo del pasado, de otros ciclos de lecturas.
Presente: Febrero 2022
Después del rápido paseo, volviendo a leer Madame Bovary de Gustave Flaubert a final de enero, no me queda el ánimo de volver a leer Ana Karenina. Tolstoi es siempre muy largo y no quiero repetir el tema de dos mujeres desdichadas: aclarando que las dos mujeres en cuestión son profundamente diferentes, se asocian una a la otra por la infidelidad y la tragedia pero son dos personalidades diferentes.
Pruebo por primera vez a leer Poul Anderson, uno de los escritores más famosos de ciencia ficción, ganador de los premios Nébula y Hugo. Hay pocas obras de él, online, pero está La nave de un millón de años. No es que haya sido totalmente de mi gusto pero es original respecto a lo que había venido leyendo hasta ahora. En esta obra se habla de la raza inmortal humana, siguiendo los pasos de algunos de ellos desde su primeras apariciones hasta el futuro, cuando, reunidos en un grupo de ocho, emprenderán el primer gran viaje interestelar, en la búsqueda de nuevos planetas habitables. En este caso “inmortal” es un término no muy apropiado porque estos seres pueden morir si sus heridas son graves ,como pueden también morirse de hambre, por el resto si se cuidan permanecen en una eterna juventud que crea el problema de tener que pasar inobservados, porque en bien pocas situaciones, fueron aceptados en el transcurso de los siglos. Es una mezcla de novela histórica con ciencia ficción, es muy agradable el pensamiento del autor de que los alienígenas no recurren al universo para conquistar mundos y someter poblaciones: si desarrollaste tecnologías para estas misiones tiene que haber superado también el concepto de conquista y de amos del universo.
Luego una pausa fantasy: Las crónicas de Narnia de C.S.Lewis. No ha sido una de mis lecturas infantiles, empecé a leer La bruja el león y el armario, muchos después de El señor de los anillos y otros libros de Bilbo. Lo busqué en una biblioteca infantil y me quedó la duda de que fuera una versión adaptada, pero ahora veo que era la versión regular. Consigo cuatro de la serie: El león, la bruja y el armario, El príncipe Caspian, La silla de plata y El sobrino del mago. Que la serie no esté completa no es fundamental porque las historias son separadas y, de nuevo el primero lo considero terrible, mientras que El sobrino del mago es una historieta divertida donde se narra el inicio de Narnia, entre otras cosas, ¿Cosa me molesta de Narnia? El león, principalmente, como personaje no lo entiendo y sus ritos antiguos, mezclados en el mundo de los animales que hablan no me convence. Otra cosa, para ir a Narnia hay que caminar y caminar, hay siempre pensar en la comida y donde pasar la noche, hay muchos contrastes entre los niños y el bullying escolar y familiar está documentado.
Entonces después de casi una semana en Narnia escojo un ensayo de Italo Calvino como estoy en el momento “fantástico” reviso que puedo conseguir de Calvino. Estaba buscando Marcovaldo, una serie de cuentos, leídos hace años, también porque se conseguían en antologías para la escuela pero nada de nada, conseguí muchos otros y aparte Cuentos populares italianos, que leeré con calma (los libros de cuentos pueden llevar mucho tiempo, porque veo inútil leerlo seguidamente) me pongo a leer El Barón rampante agradable novela que si no llega al fantasy entra en la categoría del absurdo, en resumida cuenta es la historia de un muchacho que irá a vivir en los árboles (nada que ver con Tarzán) después de una pelea con el padre y allí se quedará toda su vida. Es la época entre el siglo XVIII y XIX, el joven se relacionará por cartas con algunos de los principales filósofos franceses, tendrá ocasión de conocer a Napoleón, con el vaivén de las tropas en el territorio italiano. Una agradable novela y no pude resistir a leer enseguida Si una noche de invierno un viajero, pero para estar claros, no es una obra convencional, trata del proceso de la escritura, de la relación autor- lector, regalándonos una decena de cuentos inacabados. Es una de las últimas obras de Italo Calvino, en la fase continua de experimentación y logra ser una lectura entretenida.
Sigo con Haruki Murakami: Los años de peregrinación del chico sin color, es una de sus novelas relativamente recientes (2013). Es una novela muy moderada respecto a los vuelos de fantasía del autor, pero allí están algunos recuerdos dolorosos, la gran soledad del protagonista, los sueños que se confunden con la realidad y crean esa atmósfera de suspenso y el final abierto. Hay que tener presente con Murakami que el final quedará abierto. Como siempre hay música, aquí una pieza de Liszt. Su trabajo sucesivo (2014) es una colección de cuentos (7) titulada Hombres sin mujeres y allí está Drive my car que ha sido adaptado para el cine. La película homónima es una de las candidatas a mejor película de este año, de allí el interés en leerla ya. Esa colección se caracteriza por el tema de estos hombres que se quedan solos. Es una buena lectura, que resulta más sencilla que otras obras de Murakami.
La decisión fatal después, fue leer Middlemarch de la autora inglesa George Eliot. Una aclamada novela del siglo XIX. Siempre me ha gustado el paseo literario por los pueblos ingleses, pero aquí todo resulta pesado. Es una obra muy larga, demasiados personajes con historias que quedan suspendidas capítulos y capítulos y los personajes resultan pesados, aburridos, repetitivos. Se quieren presentar muchos temas políticos, sociológicos y religiosos, ni se me ocurre cómo pueda ser considerada una obra fundamental. La publicación en capítulos en el siglo XIX, a veces arruinaba la obra; para mí, como mínimo hubiera necesitado una nueva edición una vez terminada la publicación por partes, eliminando las repeticiones de las características de los personajes, por ejemplo.
Suerte que después de esto reviso ya las viejas descargas y me decido por Las crisálidas de John Wyndham. Quería leer Wyndham más que todo por Los trífidos, pero no lo consigo online, por eso descargue Las crisálidas hace más de un año y lo deje allí, esperando su turno. Es un post-apocalíptico interesante, una de esas obras de los años 50, motivada por la preocupación sobre la destrucción del mundo a causa del empleo del nuclear. Una novela corta de fácil lectura, sobre los seres mutantes de diferentes tipos que son rechazados por la comunidad organizada de Labrador, que preserva la pureza de la raza humana, animal y vegetal drásticamente: un grupo de niños mutantes, porque capaces de comunicarse telepáticamente, logran llegar a la adolescencia escondiendo su secreto, luego tendrán que huir para salvarse y lograran ponerse en contacto con otra población mucho más desarrollada y abierta mentalmente.
Pasado: Febrero 2021
Mes de escasas lecturas, sobre todo porque me pongo a leer mi segunda novela de Wu Ming, el colectivo italiano que se dedica a la novela histórica. Leo El ejército de los sonámbulos, ambientada en Francia después de la Revolución. El periodo histórico no es de mis favoritos, pero la descripción del ambiente de esos años difíciles es buena: se presentan personajes reales junto a la historia de los personajes ficticios y a una conspiración de la contrarrevolución, el mesmerismo ósea el estudio de la hipnosis en boga en el siglo de las luces, aplicado para los fines de la contrarrevolución, una hipótesis y relativo experimento, muy audaz. En la segunda obra que leo de Wu Ming, veo el mismo patrón: por dos tercios narración lenta, luego los acontecimientos explotan. Como históricos los aprecio y tengo en descarga otra dos novelas, quiere decir que en un futuro, volveré con Wu Ming, sabiendo que se necesita tiempo para sus novelas.
Una pausa ligera volviendo a leer Agatha Christie con La Navidad de Poirot y luego me decido a explorar el mundo de la ciencia ficción porque estaba preparando un trabajo sobre los géneros y autores de ciencia ficción. El acercamiento a la ciencia ficción siempre había sido casual con mucha distopía más que todo y la lectura de Ray Bradbury en el transcurso del año anterior, pero a partir de este momento he empezado a leer ciencia ficción seguidamente. El comienzo no ha sido bueno, porque me decidí por Fundación de Isaac Asimov y esto ha frenado un poco el interés por ese género, porque Fundación no me gustó (tengo la serie completa en descarga), con el tiempo, con calma otros autores me han apasionado y ahora estoy reconciliada también con Asimov, pero el resto del ciclo de Fundación seguirá esperando. Para finalizar un desliz: Los puentes de Madison County de Robert James Waller. Para variar el tipo de lectura pero ya sabía que no me iba a gustar, no me gustó la película, que posibilidad tenía entonces la novela si no amo el tema de mujeres traidoras y sus motivaciones (allí están Emma Bovary y Ana Karenina).
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